Los carbohidratos son un conjunto de moléculas cuya función en el organismo, fundamentalmente, es proporcionar la energía que necesita para funcionar. Están formadas por átomos de carbono, hidrógeno y oxígeno. Se van uniendo de distinta manera para formar las moléculas más simples: glucosa, fructosa, galactosa...
Los carbohidratos se organizan uniéndose en cadenas que llamamos carbohidratos complejos. Así, como carbohidratos complejos tenemos el azúcar de mesa, que es una molécula más grande formada por dos moléculas más pequeñas unidas: glucosa y fructosa. Y el azúcar de los lácteos es la lactosa, que es la unión de dos moléculas más pequeñas: glucosa y galactosa.
Cuando las moléculas de carbohidratos complejos son muy largas y entrelazadas entre sí forman los almidones. Los almidones son la forma en la que los vegetales guardan la energía que les sobra, del mismo modo que los seres humanos guardamos la energía en forma de grasa.
Por tanto, los carbohidratos (comúnmente llamados azúcares) forman parte de nuestra alimentación en todos aquellos productos que, de forma natural o artificial, llevan glucosa u otro azúcar similar en su composición. Y están en frutas, verduras, cereales, lácteos, frutos secos... En todos los productos de origen vegetal y, en el caso de los de origen animal, también. ¿Me estás diciendo que la carne lleva azúcar? Pues sí. Lo único que no lleva azúcar es la sal de mesa y el aceite.
¿Pero cómo que la carne y el pescado lleva azúcar?. Los animales, entre los que se cuentan los humanos, acumulamos glucosa en nuestros músculos en forma de glucógeno, que es la manera que tiene el organismo de guardar una parte de la glucosa que absorbe de los alimentos para que las células tengan acceso rápido a la misma. Por tanto, mientras haya glucosa suficiente en nuestro torrente sanguíneo, tendremos en reserva más glucosa en los músculos y en el hígado.
Ahora, la pregunta del millón: ¿qué es una dieta sin azúcar?. Hay personas que dicen que ellos no toman carbohidratos. Y, en realidad, lo que están diciendo es que no comen alimentos que tienen grandes proporciones de azúcar. Pero en realidad, ¿es saludable?.
Es saludable en la medida que no incorporan a su alimentación alimentos creados de forma artificial, en los que, para que estén "ricos" la industria alimentaria incorpora azúcar, sal y grasas en exceso para favorecer que los busquemos y los comamos.
En realidad, si uno quiere hacer una dieta saludable, debe elegir alimentos fundamentalmente vegetales, añadir una porción de alimentos con proteínas y una porción de alimentos con almidones. De ese modo, evita la ansiedad que nos lleva a buscar azúcares para mantener nuestros niveles de glucosa en sangre. Es cierto que siempre puede haber excepciones, pero la mayor parte de la población debe ver estos elementos en su plato cuando vaya a comer.
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