La histamina es una amina biógena que se encuentra en el cuerpo humano y en muchos alimentos. Es una sustancia química natural que juega un papel importante en la respuesta inmune, la digestión y la regulación del sueño.
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Síntomas de exceso de histamina
Cuando hay un exceso en el cuerpo, puede causar una variedad de síntomas y problemas de salud, como:
1. Reacciones alérgicas: La histamina es un componente clave de la respuesta alérgica. Cuando el cuerpo entra en contacto con un alérgeno, libera histamina para combatirlo. Esto puede causar síntomas como estornudos, congestión nasal, picazón en los ojos, urticaria e inflamación.
2. Intolerancia a la histamina: Algunas personas tienen una sensibilidad a la histamina, lo que significa que experimentan síntomas incluso con niveles bajos de histamina en el cuerpo. La intolerancia puede ser causada por una deficiencia de la enzima DAO (diamino oxidasa), que es responsable de metabolizar la histamina.
3. Trastornos digestivos: La histamina puede afectar el sistema digestivo de varias maneras. Puede aumentar la producción de ácido gástrico, lo que puede causar acidez estomacal, reflujo ácido y úlceras gástricas. Además, puede estimular la motilidad intestinal, lo que puede provocar diarrea.
4. Dolores de cabeza y migrañas: La histamina puede dilatar los vasos sanguíneos en el cerebro, lo que puede causar dolores de cabeza y migrañas.
5. Problemas cardiovasculares: La histamina puede aumentar la frecuencia cardíaca y la presión arterial. En casos raros, puede causar arritmias cardíacas.
6. Trastornos del sueño: Puede interferir con el ciclo de sueño y vigilia, lo que puede causar dificultad para conciliar el sueño o despertarse durante la noche.
7. Otros problemas: También puede causar síntomas como mareos, ansiedad, depresión, fatiga y dolor muscular.
Es importante tener en cuenta que la mayoría de las personas no experimentan problemas con ella. Sin embargo, si tienes síntomas que crees que pueden estar relacionados con ella, es importante consultar a un especialista para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.
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Aquí hay algunos consejos para ayudar a reducir los problemas
- Evita los alimentos ricos en histamina: Estos incluyen alimentos fermentados (como el queso, el vino y el yogur), carnes curadas, pescado ahumado, mariscos, frutas cítricas, tomates, espinacas y alcohol.
- Consulta a tu médico por si necesitas antihistamínicos. Pero ¡ojo! Algunos antihistamínicos reducen la actividad de la DAO, por lo que estaríamos haciendo un pan con unas tortas…
- Aumenta tu disponibilidad de DAO: La DAO es la enzima que la metaboliza. Puedes aumentar tu disponibilidad de DAO comiendo alimentos ricos en vitamina C, como las frutas (no las cítricas o el plátano porque tienen otras aminas biógenas que pueden agotar la DAO) y los pimientos. O también puedes disminuir la cantidad en el organismo comiendo alimentos que contienen quercetina, como la cebolla.
Si tienes preguntas o dudas sobre la histamina, consulta a tu médico o a tu especialista en nutrición.
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